Actualmente la situación ha cambiado y desarrollar un nuevo proyecto sin tener en cuenta la domótica no tiene sentido, ya que el esfuerzo que supone toda la obra es insignificante.
La experiencia de la domótica es clave para comprender su valor
Para convencer a un nuevo cliente, es fundamental que pueda utilizar las ventajas de la domótica en el momento y probar las distintas opciones de un panel de control, gestionar las condiciones ambientales de una habitación, cambiar la intensidad y el color de la luz, la temperatura, e incluso interactuar con los diversos tipos de interruptores y sus sensores
El usuario debe darse cuenta de lo que realmente quiere controlar
Los sistemas domóticos pueden llevar al usuario a querer controlar todo sin mucho sentido. La domótica, por definición, debe ser globalmente inteligente, por lo que tiene que funcionar como un sistema que facilita los procesos sin complicar innecesariamente la vida del usuario. Automatizar el funcionamiento de una plancha o cafetera, por ejemplo, puede mejorar realmente la calidad de vida del usuario , como programar el encendido de luces, alarmas y/o calefacción en determinados momentos del día. Además de contribuir al ahorro energético de la energía en la misma.
Es más eficiente utilizar la automatización del hogar para «generar soluciones integradas» que para realizar funciones individuales.
Una vez identificadas las necesidades del usuario, es necesario planificar soluciones integradas que permitan la programación y control de los entornos. Por ejemplo, si selecciona un ambiente predefinido para la noche, el sistema atenuará y apagará las luces, cerrará las cortinas y activará la alarma en una sola operación. Esto no excluye tratar cada opción por separado, pero es más fácil y eficiente pensar en ellas como respuestas en su conjunto desde el principio.
No existen diferencias entre un plan eléctrico tradicional y un plan domótico
Para llevar la domótica al lugar de construcción, el arquitecto necesita definir, en primer lugar, la ubicación de los interruptores y otros dispositivos y sus funciones específicas. Con este plan, la empresa encargada de la instalación de los sistemas de automatización se encarga de intervenir en el momento en la instalación eléctrica y de poner en marcha al especialista la integración del cableado necesario para la domótica. Este cableado UTP es mucho más simple que el utilizado tradicionalmente y ocupa un solo conducto de cable.
Es importante señalar que la domótica debe estar incluida en el anteproyecto antes de que comiencen las obras mayores, ya que todo el proceso se vuelve más complejo en las etapas más avanzadas.
Instalación del sistema domótico
No es preciso que el electricista o propietario sea un experto en domótica para instalarlo. La capacitación sobre este proceso se puede completar en sólo unas pocas horas.
El sistema de domótica reduce significativamente el consumo de energía del edificio
En el caso de los hoteles, la domótica permite un aislamiento completo de las habitaciones y espacios no utilizados y mantiene el control detallado sobre el uso que cada huésped le da a cada habitación. Por ejemplo, si un huésped ha encendido la calefacción de su habitación y abre una ventana, el sistema térmico se apaga para evitar este desperdicio de energía. Incluso de noche, mientras el huésped duerme, el sistema se puede programar para que la temperatura baje ligeramente, lo que ahorra mucha energía sin que se note.
Además, en edificios con redes trifásicas, es posible determinar un consumo energético máximo mensual, lo que evita que el gasto a final de mes supere el límite especificado. El panel de control le da al usuario una visión completa de este consumo; diaria, semanal, mensual o anual.
La domótica mejora la calidad de vida de las personas mayores o con movilidad reducida
Con paneles de control centralizados y sensores de movimiento, la automatización del hogar puede facilitar y apoyar significativamente la forma en que las personas mayores o con movilidad reducida viven en sus habitaciones cotidianas. Entre otras cosas, es posible programar la iluminación para que se encienda a una determinada hora del día, aumente su intensidad a lo largo de las horas o la encienda y apague automáticamente cuando la persona entre en determinadas habitaciones.
Las alarmas de los sistemas de domótica permiten el control remoto de intrusiones o peligros
La integración de la alarma en un sistema domótico evita la conexión con un centro de control, avisa al usuario directamente en su teléfono móvil y muestra en detalle qué puerta o qué ventana ha sido manipulada. Si las cámaras de vigilancia están integradas, puede ver lo que está sucediendo en el edificio en tiempo real.
En caso de otros peligros, como una fuga de gas o agua, el sistema advierte al usuario que cierre el paso a estos elementos hasta encontrar una solución definitiva al problema.