El clima invernal puede ser realmente problemático para las carreteras, por lo que los organismos competentes en un esfuerzo por mantener las carreteras seguras barren la nieve, y para evitar la formación del hielo esparcen sal. Este compuesto químico ayuda a que el hielo en las vías se rompa y se derrita; sin embargo, no es buena para los vehículos por ser altamente corrosiva y podría erosionar varios componentes del coche, entre ellos los frenos.
Los frenos forman parte de la seguridad activa del vehículo, por ello es importante que se les preste especial atención en temporadas frías, ya que las bajas temperaturas podrían alterar un poco su desempeño. Al conducir por vías nevadas es posible almacenar sucio, nieve y sal debajo del coche; esa acumulación podría afectar los elementos del sistema de frenado, como las pastillas, los rotores, zapatas y pinzas.
Cómo cuidar los frenos del coche durante el invierno
Cuando las líneas de freno se corroen pueden tener filtraciones y eso le ocasiona fallas a los frenos. Si localiza una fuga o nota cambios en la sensación que tiene al pisar el pedal de freno, debería llevar el coche al taller para solucionar la avería; así no se expone usted ni a las demás personas a un posible accidente.
Recuerde que, aunque no tiene el control sobre las condiciones climáticas, sí lo tiene en cuanto a las precauciones a tener para evitar inconvenientes a raíz de ellas. Al circular por carreteras que hayan sido tratadas con sal, es recomendable que después haga que a su vehículo le laven los bajos. De esta manera, se retira la acumulación de sal que pueda tener; esto también podría realizarlo en casa, si lo prefiere, más lo importante es limpiarlo.
Aunque todo el coche debe mantenerse limpio, se tiene como prioridad el chasis y el alojamiento de las ruedas, porque en tales áreas es por donde podrían ingresar impurezas, como la nieve y la sal a las diversas partes mecánicas del vehículo. Al lavarlo se impide la formación de óxido, incluso en lugares de difícil acceso; recuerde también secarlo adecuadamente, esa es una ventaja de los servicios de lavado, dado que suelen tener sopladores para ello.
La acumulación de sal, además de que podría atascar el freno de mano, arruinaría la carrocería y otras partes del vehículo. Bien sea por averías o por algún accidente que sufra y llegue a la conclusión: “mejor vendo coche para desguace”, asegúrese de que sea un lugar confiable.